Si sigues bien las indicaciones de los símbolos de lavado de las etiquetas, usas detergentes delicados y las dejas secar bien antes de guardarlas, conseguirás alargar la vida de tus toallas. Pero lo cierto es que pasado un tiempo habrá llegado el momento de renovarlas.
Por si no lo tienes claro del todo, hay cuatro indicios clave que te indican que ha llegado el momento de comprar toallas nuevas.
1. Ya no secan como al princpio
Cada vez que las lavas van perdiendo fibras y por lo tanto su poder de absorción. De hecho seguro que pasado cierto tiempo las notas más finas y apelmazadas.
2. Han perdido suavidad
Las fibras se van dañando y en consecuencia pierden suavidad. Esto hace que el contacto con la piel ya no sea tan agradable.
3. Huelen mal
Por más que las lavas no terminan de coger buen olor. Tal vez, si las dejas secar bien antes de volver a usarlas evites esa sensación. Eso sí, si en cuanto se mojan regresa el mal olor, es el momento de desahacerse de ellas.
4. Colores deslavados
Los colores se pierden después de muchos lavados. Además el calor de las secadoras provoca que se encojan y se deformen.
Así que ya sabes, si reconoces estas cuatro señales… ¡ha llegado el momento de comprar toallas nuevas.